El Día de la Soberanía Nacional, establecido como feriado en 2010, conmemora la Batalla de la Vuelta de Obligado, ocurrida el 20 de noviembre de 1845. En aquel momento, Juan Manuel de Rosas gobernaba el país y también ejercía como gobernador de Buenos Aires. El enfrentamiento marcó un hito en la defensa de la soberanía argentina frente a las potencias europeas.
Inglaterra y Francia buscaban imponer la libre navegación y el comercio por los ríos interiores de la Confederación Argentina, y para lograrlo bloquearon el puerto de Buenos Aires. Aquella medida representó una amenaza directa a la independencia y a la autoridad nacional.
La resistencia tuvo lugar en la Vuelta de Obligado, a 18 kilómetros de la ciudad de San Pedro, donde las tropas argentinas enfrentaron a la flota extranjera. Si bien no pudieron impedir el avance de los barcos, los puertos del río Paraná se negaron a comerciar con las fuerzas invasoras, reafirmando así el espíritu de soberanía y unidad del país.