Otra vez la Ruta 33 !!!

La rotura de cubiertas y llantas es una constante.

   

Esta vez una moto. La conducía Mario Gómez, vecino de nuestra ciudad y propietario del rodado, una Yamaha 250cc; a poco kilómetros luego de haber pasado frente al acceso a Cañada Seca y en sentido hacia Rufino no logró maniobrar y terminó con las dos ruedas en el estado en que se aprecian. Afortunadamente, y es un motivo para el consuelo, no pasó a mayores, seguramente una caída podría haber sido peor.

Tanto las llantas como las ruedas se destrozaron cuando impactaron contra uno de los tantos «baches – pozos (leáse cráteres, en algunos casos)» tiene esta ruta.

No es el primero y segura y lamentablemente no será el último que deba pasar por una situación con estas características, ya que se ha vuelto algo frecuente. Al riesgo de las roturas se le suma, y en esto va la vida, que en una maniobra por esquivar un pozo terminen impactando dos o más vehículos entre si.

Hasta ahora las autoridades competentes le hacen honor a una canción de Shakira «Siega/os, sorda/os y muda/os».