¿Cómo hizo Formica para descubrir quién le robó las ovejas?

A raíz del allanamiento (positivo) de esta tarde en que la Policía logró secuestrar cinco ovinos en un domicilio de la calle Alberti que le habían sido robados a José Luis Formica el viernes pasado, es que pudimos saber cuál fue el método irrefutable del que se valió este productor para descubrir a los malvivientes.

Todo comenzó cuando comentó a Distrito Interior que el viernes a las 21:28 hs. habían ido por sus ovejas.

La exactitud en el horario nos llamó la atención y comenzamos a indagar en profundidad.

Cansado de los reiterados robos en su campo ubicado detrás del Hipódromo Municipal, en la zona de Los Laureles que van desde animales hasta distintos elementos de la casa pequeña casa que construyó en el lugar y todavía no pudo estrenar por distintos motivos, decidió acudir a la tecnología.

Así fue que colocó cámaras de seguridad estratégicamente ubicadas, de las que ni su propia familia sabía.

Esta medida la adoptó luego de varios intentos por contratar personas para su campo, pero en ninguno de los casos logró que alguno aceptara quedarse en la noche o trabajar de manera regular a través del tiempo.

Las consecuencias de esta situación que se repite en un alto porcentaje del sector rural, fue entre otras cosas, la facilidad para que los ladrones ejerzan.

El sábado 17 al llegar notó que las ovejas, que en principio fueron 250 y actualmente ese número se redujo a 94, estaban encerradas y las tranqueras habían sido abiertas y cerradas por «el visitante» de siempre por el modo en que procedía hasta ese momento sabía que era «él» pero no quien.

Así fue que recurrió a la grabación de las cámaras la que le permitió identificarlo (material que estaría liberado pronto).

Con el dato aportado a la Policía y habiendo comprobado el lugar en el que vivía su victimario y el de sus ovejas, con el que se sorprendió porque estaba usando en las horas previas al allanamiento la misma ropa, gorra y anteojos con los que había actuado a las 21:28 del viernes.

En la oportunidad no actuó solo y se habrían movilizado al menos en dos motos, por lo menos al recorrer las inmediaciones momentos antes de dar el golpe.

Con la simpleza de lo detallado se llegó a saber quién, cuándo y cómo robó, allanar su domicilio y secuestrar los animales, pero hasta el momento no encarcelarlo porque así es el proceso y la justicia (para no entrar en detalles).

Hoy Formica puede estar un poco más tranquilo, pero no tanto.

Hoy muchos productores sabrán que pueden tener ojos tecnológicos y parciales soluciones (en este contexto legal).

Hoy la gente en general y de bien puede decir que ganó una batalla en medio de una guerra (no literal) en la que lo obligan a combatir con un cortapapeles cuando el enemigo lo hace con una espada.