Una conocida vecina fue estafada en una importante suma de dinero cuando intentó contactarse con el banco Galicia a través de una red social

Resulta ser uno de los tantos cuentos del tío con los que los delincuentes convierten a la gente en sus víctimas.

Pero este caso tiene una marcada diferencia con el resto.

Independientemente del banco, en este caso el Galicia, sucursal General Villegas (también ha sucedido con el provincia, Santander, entre otros), María Haugh, reconocida por su labor con el rescate de perros y gatos de la calle, intentó ganar tiempo al habilitar el home banking de la institución para comenzar a operar de manera virtual en el banco del que ella y su pareja son clientes.

Decidida, busca a traves de la red social Facebook el perfil del banco, logra contactarse, le responden, solicitan un número telefónico y a la brevedad la llaman.

A partir de allí todo sucedió como relatan la mayoría de las víctimas; debió ir al cajero, suministrar el CBU, supuestamente para lograr la habilitación del nuevo canal de comunicación con el banco, entre otros requerimientos.

Al cabo de unas horas cuando intentó abonar con la tarjeta de débito una compra en un comercio el saldo era insuficiente. No solamente le habían vaciado la cuenta sino que además en nombre del titular habían tomado 3 créditos por un valor de $ 250.000.

Acto seguido, el asesoramiento para proceder, la denuncia y el contacto real con el banco por la estafa.

Por el momento, se pudo saber que el llamado provino de un número con característica de Capital Federal y la extracción el dinero se realizó en Córdoba.

Aún no habiendo dudas que se trato de un engaño, María y su pareja negocian con el banco los intereses de los créditos de los que deben hacerse cargo, al menos hasta que la justicia, si interviniera dispusiera lo contrario.

El dolor más grande, es la impotencia que produce estar al tanto de estas maniobras y haber caído inocentemente, expresó con lágrimas en los ojos.

La suya es una anécdota más; dicho así, porque lamentablemente las novedades respecto a lo que se ha hechoo pudiera hacer una vez que se cometen estos delitos, es casi nula (o nula); pero hay un enorme vacío en lo que sucede.

En este caso el banco Galicia, sabiendo de la cantidad de denuncias por estas acciones, principalmente las que toman créditos porque han logrado acceder a la cuenta de sus clientes, ¿no debería ser más exigente a la hora de otorgar un crédito teniendo como requisito la presencia física del titular en la sucursal al menos?.

En nombre de la seguridad y su resguardo como empresa en muchos casos cuentan con exigencias casi incumplibles, pero resultan muy flexibles facilitando (seguramente sin malas intenciones) el propósito a los estafadores.

Llama también la atención que ningún ente estatal de cualquiera de los niveles o sus integrantes se haya iluminado para hacer una presentación al respecto.

Omitir en estos casos, puede mostrar deficiencia pero tambien cierto grado de complicidad (aunque sea involuntario).